A partir de nuestro objeto de estudio, esquema de investigación y el problema planteado, decidimos tomar dos muestras de tipo no probabilística de forma correspondiente a dos fases de experimentación propuestas.
La muestra estará constituída, en una primera instancia, por sujetos experimentales con los que se realizan los estudio base que forman parte de la llamada “pre-prueba” de clase “de sujetos tipo”, y en una segunda instancia, por aquellos sujetos que se encuentren padeciendo alguna de las enfermedades en investigación, formando parte de la “post-prueba” de clase “de sujetos voluntarios”.
La muestra se tomará de los conjuntos definidos a continuación. Esta experiencia se dividirá en:
Unidad de análisis
Ratones de laboratorio (nombre científico: Mus Musculus).
Características de la población
Transgénicos. Deberán ser modificados genéticamente para que contraigan alguna de las patologías sobre las cuales se quiere estudiar y deberán pertenecer a una misma cepa con el fin de facilitar la comparación de los resultados sin que se produzca confusión debido a las diferencias genéticas.
(Nota: Una cepa es una variante genotípica de una especie propagada con técnicas de clonación.)
Individuos sufriendo de alguna enfermedad degenerativa, ya sea hereditaria, genética o congénita.
Unidad de análisis
Hombres y mujeres que presenten alguna de las patologías sobre las cuales se quiere estudiar.
Características de la población
Edad. Entre 21 y 70 años, divididos en grupos etarios de 5 años.
Estado evolutivo de la enfermedad no avanzado. Las personas deberán estar atravesando las primeras etapas de la enfermedad.
Individuos sufriendo de alguna enfermedad degenerativa, ya sea hereditaria, genética o congénita.
10 individuos por enfermedad
1 individuo por enfermedad de cada grupo etario.
Elegimos el tipo de muestra no probabilística porque es el que mejor se ajusta a nuestro proyecto de investigación. Si bien el criterio de selección de los elementos de la muestra obedece a lo que consideramos necesario para una primera contrastación de la hipótesis planteada con el mundo empírico, no deja de ser arbitrario. Los elementos de la población no responden a una probabilidad de selección definida.
En una primera instancia, modificaremos genéticamente a los ratones de laboratorio para inducirles las distintas patologías que se desean estudiar. Trabajando con ratones que pertenezcan siempre a una misma cepa, los dividiremos en grupos, tantos de acuerdo a la cantidad de variables y condiciones que sean necesarias evaluar. A cada grupo le serán sumistradas tantas aplicaciones de células madre como lo requiera el tipo de patología. Evaluaremos cómo responden ante los distintos estímulos y en las diversas condiciones, y haremos hincapié en aquellos grupos que presenten los resultados más favorables, analizándolos aún en mayor profundidad.
Una vez analizados y comparados los resultados de esta primera fase, consideramos sólo aquellas condiciones en las que nuestro experimento tuvo resultado exitoso. En una segunda instancia, teniendo en cuenta las consecuencias de las experimentaciones anteriores y siempre dentro de las condiciones que fueron establecidas como seguras y eficaces, se procede a ensayar sobre hombres y mujeres que voluntariamente se hayan ofrecido a participar.
Los verdaderos resultados o conclusiones se verán reflejados en la evolución de la enfermedad del paciente sometido a experimentación.